La casa de los suicidios de Montpelier Road
La casa del 16 Montpelier Road, Londres donde llegó el
cazador de fantasmas Andew Green. En septiembre de 1944 el joven llamado Green
visitó la casa siendo un niño. Desde fuera miró la casa y bajo la luz del sol
de otoño vio una torre que sobresalía por el techo. En aquella época todavía
había casas destruidas y dañadas por la Segunda Guerra Mundial, vacías sin
habitar, pero esta era diferente a las demás.
La razón de que estuviera vacía fue por lo sucedido en el pasado, un macabro y desconcertante suceso. En 1934 una niñera se arrojó por la ventana de la parte superior de la torre, cayendo 70 pies de altura al jardín, pero antes de eso ella lanzó a su joven pupilo, ambos murieron.
(Green dice que su madre, una enfermera vio los efectos del suceso sombrío, vio huellas espectrales aparecer en la hierba, como personas invisibles caminando sobre ella)
Pero esta no fue la única muerte trágica que se produjo en la casa. Cuarenta y siete años antes, una niña de 12 años llamada Anne Hinchfield también saltó desde la misma habitación de la torre. Y aún hay más, hasta veinte suicidios sucedieron desde esa extraña torre.
En el momento de la visita de Green, las habitaciones estaban siendo utilizadas por el ayuntamiento para el almacenaje de mercancías que habían sido salvadas de los bombardeos. Los obreros fueron enviados a reparar la casa y arreglarla, pero un fuerte olor a azufre apareció, las herramientas desaparecían inexplicablemente y una atmósfera opresiva parecía estar actuando, ellos tenían que salir de trabajar de allí pocas horas después de empezar, y los equipos de trabajadores posteriores les sucedían lo mismo, la infamia de la casa empezó a crecer.
El conocimiento de esto produjo mayor interés a Green, y más aún cuando se encontró en la escalera que conducía al piso superior de la torre, entonces decidió echar un vistazo. Subió los peldaños, y sintió algo que lo sujetaba de la cintura y le ayudaba a subir. En la parte superior una extraordinaria vista de la zona. Entonces cuando el muchacho miraba a los otros tejados de Londres, oyó una curiosa voz en su cabeza:
"Ten una mirada al jardín", dijo , "Camina hacia el parapeto".
Se acercó y vio extraños símbolos tallados en la mampostería a su alrededor, se acercó a la orilla del parapeto, "estas a solo 12 pulgadas del césped", continuó la voz. "No te harás daño".
Green se sentó en el borde del parapeto y se preparó para saltar, pero antes de que pudiera lanzarse al aire un par de fuertes manos se acercaron a su alrededor. Las manos de su padre, y sintió ser arrastrado hacia atrás, a la seguridad.
Por la tarde, cuando Green salió de la casa para tomar una fotografía el edificio que estaba cerrado y vacío en ese momento, levantó la cámara a su ojo y nada inusual vio, algunas personas dicen ver en la imagen una figura fantasmal de una joven vestida con traje victoriano, ¿sería la pobre Ana Hinchfield capturada por la fotografía de Andrew Green? ¿O simplemente fue una peculiar reflexión de la luz?
Por la década de 1950 el interior de la casa fue modificada para dar cabida y crear 15 pisos. Algunos de los ocupantes todavía se quejaron de extrañas idas y venidas: pisadas de fantasmas y resurgió lo extraño. Dos décadas después la casa fue demolida para dar paso a un nuevo bloque de apartamentos llamado Elgin Court. Algunos escritores dicen que los residentes todavía siguen informando sobre extrañas idas y venidas.
Por lo tanto, sabiendo que se han producido tantos suicidios ¿qué podría haber causado tantas muertes trágicas?
Una teoría radica en la magia negra. Después de la historia de la casa, Green publicó un libro en 1973, Our Haunted Kingdom. Una señora mayor contactó con él. Ella afirmó que había trabajado como sirvienta allí a finales de 1800 y describe como llevaba alfombras y velas negras a la torre cada viernes por la noche. ¿Esto sería parte de algún rito mágico? La doncella sin duda eso sugirió. Esto junto con los extraños dibujos tallados llevó a pensar que sería algún asunto con fuerzas oscuras y mágicas que se liberarían en la casa.
En cuanto a ese olor desagradable, Andrew Green describió cómo parecía emanar de la habitación donde en el pasado se instaló un laboratorio químico. ¿Podría haber sido posible que algún químico mezclara el olor fétido que penetrara por todo el edificio o fue un olor reavivado por alguna condición climática del momento?
La razón de que estuviera vacía fue por lo sucedido en el pasado, un macabro y desconcertante suceso. En 1934 una niñera se arrojó por la ventana de la parte superior de la torre, cayendo 70 pies de altura al jardín, pero antes de eso ella lanzó a su joven pupilo, ambos murieron.
(Green dice que su madre, una enfermera vio los efectos del suceso sombrío, vio huellas espectrales aparecer en la hierba, como personas invisibles caminando sobre ella)
Pero esta no fue la única muerte trágica que se produjo en la casa. Cuarenta y siete años antes, una niña de 12 años llamada Anne Hinchfield también saltó desde la misma habitación de la torre. Y aún hay más, hasta veinte suicidios sucedieron desde esa extraña torre.
En el momento de la visita de Green, las habitaciones estaban siendo utilizadas por el ayuntamiento para el almacenaje de mercancías que habían sido salvadas de los bombardeos. Los obreros fueron enviados a reparar la casa y arreglarla, pero un fuerte olor a azufre apareció, las herramientas desaparecían inexplicablemente y una atmósfera opresiva parecía estar actuando, ellos tenían que salir de trabajar de allí pocas horas después de empezar, y los equipos de trabajadores posteriores les sucedían lo mismo, la infamia de la casa empezó a crecer.
El conocimiento de esto produjo mayor interés a Green, y más aún cuando se encontró en la escalera que conducía al piso superior de la torre, entonces decidió echar un vistazo. Subió los peldaños, y sintió algo que lo sujetaba de la cintura y le ayudaba a subir. En la parte superior una extraordinaria vista de la zona. Entonces cuando el muchacho miraba a los otros tejados de Londres, oyó una curiosa voz en su cabeza:
"Ten una mirada al jardín", dijo , "Camina hacia el parapeto".
Se acercó y vio extraños símbolos tallados en la mampostería a su alrededor, se acercó a la orilla del parapeto, "estas a solo 12 pulgadas del césped", continuó la voz. "No te harás daño".
Green se sentó en el borde del parapeto y se preparó para saltar, pero antes de que pudiera lanzarse al aire un par de fuertes manos se acercaron a su alrededor. Las manos de su padre, y sintió ser arrastrado hacia atrás, a la seguridad.
Por la tarde, cuando Green salió de la casa para tomar una fotografía el edificio que estaba cerrado y vacío en ese momento, levantó la cámara a su ojo y nada inusual vio, algunas personas dicen ver en la imagen una figura fantasmal de una joven vestida con traje victoriano, ¿sería la pobre Ana Hinchfield capturada por la fotografía de Andrew Green? ¿O simplemente fue una peculiar reflexión de la luz?
Por la década de 1950 el interior de la casa fue modificada para dar cabida y crear 15 pisos. Algunos de los ocupantes todavía se quejaron de extrañas idas y venidas: pisadas de fantasmas y resurgió lo extraño. Dos décadas después la casa fue demolida para dar paso a un nuevo bloque de apartamentos llamado Elgin Court. Algunos escritores dicen que los residentes todavía siguen informando sobre extrañas idas y venidas.
Por lo tanto, sabiendo que se han producido tantos suicidios ¿qué podría haber causado tantas muertes trágicas?
Una teoría radica en la magia negra. Después de la historia de la casa, Green publicó un libro en 1973, Our Haunted Kingdom. Una señora mayor contactó con él. Ella afirmó que había trabajado como sirvienta allí a finales de 1800 y describe como llevaba alfombras y velas negras a la torre cada viernes por la noche. ¿Esto sería parte de algún rito mágico? La doncella sin duda eso sugirió. Esto junto con los extraños dibujos tallados llevó a pensar que sería algún asunto con fuerzas oscuras y mágicas que se liberarían en la casa.
En cuanto a ese olor desagradable, Andrew Green describió cómo parecía emanar de la habitación donde en el pasado se instaló un laboratorio químico. ¿Podría haber sido posible que algún químico mezclara el olor fétido que penetrara por todo el edificio o fue un olor reavivado por alguna condición climática del momento?
Fuente en inglés (English source)
Fotografía de Andrew Green
Una imagen de una niña parece verse en la ventana
Elgin Court
